La alimentación en la Biblia, una historia compleja

Este trabajo es una actualización de otro en nuestra revista titulado ‘Historia de la alimentación en la Biblia

Carlos AzcoytiaLeyendo al historiador y filósofo Jean Soler, autor de importantes investigaciones sobre el monoteísmo, llegué a la conclusión de que es cierto qué desde siempre se enfocó de forma banal el estudio de la alimentación en la Biblia; se ha buscado lo más obvio, lo fácil, ocultando o ignorando la filosofía implícita del conjunto de sus enseñanzas, despreciando el origen real de sus leyes y admitiendo dichas disquisiciones casi al capricho de sus redactores, cuando en realidad todo obedece a un pensamiento coherente y perfectamente reglado.

Igualmente, siempre que se describe un tipo de alimentación de áreas más o menos extensas, por ejemplo la cocina mediterránea, no se tiene en cuenta la influencia de la religión en las costumbres alimenticias de los pueblos, de modo que se generaliza y se patina sobre la nata sin adentrarnos en materias más complejas, justificando costumbres que, independientemente de ser más o menos acertadas, encajan dentro de la visión miope de la historia de la alimentación.

Si tenemos presente que la Biblia es la base de todas las religiones de Occidente, entiéndase entre ellas la hebraica, la mahometana y la católica, con todas sus ramificaciones y franquicias, será fácil de observar la concordancia a la hora de elegir ciertos tipos de alimentos, así como una uniformidad agronómica, ganadera y de tipos de cocción, algo que nos puede parecer lógico cuando en realidad son leyes ‘forzadas’ que aceptamos dentro de la alimentación, sin preguntarnos nada más y extrañándonos de otras costumbres fuera de nuestro entorno, por ejemplo comer carne de serpiente, cánidos o insectos en otras civilizaciones, algo que se agrava de forma especial cuando las costumbres ancestrales relacionadas con la alimentación chocan frontalmente con las enseñanzas que subliminalmente, en algunos casos, impregnan nuestra sociedad y que en otros son motivo de asco y desprecio. Sigue leyendo

La historia de la alimentación en la Baja Edad Media en Sevilla, capítulo I

Carlos AzcoytiaExiste un libro que por ser poco conocido, algo que nunca he llegado a comprender, merece un estudio en profundidad ya que nos muestra un momento histórico excepcional en el terreno de la alimentación en España, años antes de la llegada de los españoles a las tierras americanas, donde podemos conocer los alimentos que se comían y la relación que tenían con la salud de la población, cuestión esta importante para llegar a comprender la influencia de estos como elementos químicos, dependiendo del tipo de persona, que sirvieron para la sanidad. Si a eso le sumamos que se circunscribe a un área reducida y puntual, la ciudad de Sevilla, nos puede ayudar a comprender un poco mejor el triunfo o no de los productos americanos en el continente europeo, ya que dicha ciudad fue el epicentro del comercio, de la exportación e importación de todo tipo de mercancías y donde se estudiaban los vegetales desconocidos que llegaban desde Las Indias Occidentales.

El libro en cuestión lleva el largo título, entonces era así, de ‘Sevilla medicina. Que trata el modo conservativo y curativo de los que habitan en la muy insigne ciudad de Sevilla, la cual sirve y aprovecha para cualquier otro lugar de estos reinos’, obra escrita entre los años 1418 y 19 y que permaneció inédita hasta el año 1545 que la publicó a sus expensas el muy notable médico Nicolás de Monardes Alfaro, al que hago muchas referencias cuando trato de los alimentos traídos de América, ya que fue el que se dedicó a estudiarlos y aclimatarlos en su huerto que estaba situado en plena calle Sierpes, en el corazón de la ciudad, y del que en su momento utilicé en un experimento en el que demostraba la fragilidad de la información que existe en Internet donde el copiar unos de otros puede hacer que se de cómo ciertas las informaciones erróneas o sesgadas, que de todo hay, llegando a tanto qué hasta los cicerones que enseñan su tumba en un convento de Sevilla la dan por verdadera, refiriéndome en este caso concreto a la historia del tomate, donde explico toda una trama que demuestra lo que digo, algo que sentó mal a los mismos copistas (que jamás hacen referencia de las fuentes y así les va) y a otros rebuznantes que no ven más allá de unos milímetros de sus cortas entendederas y que llegaron a confundir un experimento con una burla, allá ellos. Sigue leyendo

José Celestino Mutis y los alimentos

Cecilia Restrepo ManriqueLeyendo sobre José Celestino Mutis y su empresa, me pareció interesante investigar sobre las plantas comestibles que él clasificó en la Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada.

Empiezo presentando al naturalista y medico Don José Celestino Bruno Mutis y Bosio: nació en 1732 en Cádiz, Andalucía, sus padres fueron Julián Mutis y Gregoria Bosio. No se conocen datos de su niñez, aunque parece que su familia era acomodada y pudo procurarle una buena educación, ya que tuvo la oportunidad, pocos la tenían en su época, de estudiar Gramática y Filosofía en Cádiz y luego Medicina en Sevilla, no obstante le gustaba la botánica, la geografía, las matemáticas y todo lo relacionado con la ciencia, por eso le apodaban, el ‘Sabio’ Mutis. Desde muy joven era destacado en el medio naturista y se relacionaba con reconocidos investigadores.

1760 fue un año crucial en su vida, tenía 28 años, y fue invitado por Don Pedro Messia de la Cerda, nuevo virrey en las tierras americanas, para servirle de médico en el Nuevo Reino de Granada. Su deseo fue siempre viajar algún día a estudiar las plantas de lugares lejanos y esta fue la ocasión para hacerlo, por lo cual, aceptó inmediatamente el honor ofrecido, esperando encontrar allí materiales que le permitiesen profundizar en los estudios naturistas y sobre todo del ecosistema Neogranadino.

El virreinato del Nuevo Reino de Granada se había conformado en 1739 con la integración de los territorios de Nueva Granada, Venezuela y Quito, eran tiempos de crisis tanto económica como social, ya que la Corona dedicaba mucho dinero para combatir a los piratas, había nuevos impuestos, se descontrolaba el contrabando y la sociedad estaba estratificada pues las diferencias sociales eran muy marcadas, situación ésta difícil de manejar. Sigue leyendo

Las costumbres alimenticias y la gastronomía que conoció Marco Polo en su viaje a China

Cuando todos los políticos son corruptos o cómplices, los sindicatos defienden el capital, la banca manda en la sombra y la justicia no es justa sólo nos queda un camino, la revolución.

 

Carlos AzcoytiaRevisando papeles encontré un trabajo inconcluso, escrito hace ya hace casi dos décadas, sobre la gastronomía que conoció Marco Polo en su viaje a China y que voy a trascribir sin hacerle arreglos, tal cual está redactado, y que son anotaciones y citas de su libro.

En primer lugar veo necesario hacer una semblanza o biografía de Marco Polo para comprender mejor su vida y la veracidad de todo lo que cuenta.

¿Quien fue Marco Polo?

Marco Polo (c. 1254-1324), viajero italiano y escritor, con cuya obra conocieron los europeos la primera descripción fidedigna del modo de vida en el Lejano Oriente.

Nació en Venecia. Su padre y su tío eran mercaderes venecianos y socios. En uno de los viajes que hicieron como mercaderes (1260) fue el que hicieron por tierra, desde Bukhoro, en Uzbekistán, a China. Allí permanecieron durante algunos años en Kaifeng, la capital oriental del emperador mongol Kublai Khan, y regresaron a Venecia en 1269. Dos años después, llevando con ellos a Marco Polo, emprendieron su segundo viaje a China. La ruta que siguieron los llevó en un viaje por tierra desde Acre (actualmente en Israel) a Hormuz, en la entrada del golfo Pérsico. Desde allí, hacia el norte, a través de Irán hasta el río Oxus (en la actualidad denominado Amu-Darya), en Asia central. Después ascendieron por el Oxus, cruzaron Pamir, y llegaron a la región de Lob Nor, en la provincia de Sinkiang (en la actualidad la región autónoma de Xinjiang Uygur), en China, y por último cruzaron el desierto de Gobi y llegaron a la corte de Kublai Khan, por aquel entonces en la ciudad de Shangdu (Shang-tu), China, en 1275. De esta forma, se convirtieron en los primeros europeos que visitaron dichos territorios, en especial Pamir y el desierto de Gobi. Sigue leyendo

Los Mascogos, unos breves comentarios sobre su historia y comida tradicional

Martha Delfin GuillauminHace años, en 1987, cuando estudiaba la carrera de Etnohistoria en la Escuela Nacional de Antropología e Historia, tuve la clase de Etnografía de México y me llamó la atención que la profesora que dictaba la clase sólo considerara a los Kikapúes del Estado de Coahuila como indígenas de este país, no tomando en cuenta a los otros que yo creía que sí lo eran, es decir, los Mascogos. Grande fue mi sorpresa al enterarme de que éstos no eran reconocidos como miembros de ningún pueblo originario de México en aquel entonces. Tuvieron que pasar más de dos décadas para que esta situación de reconocimiento cambiara a favor de los Mascogos. Sigue leyendo